Colomos ardió nuevamente. Ahora no fue por las polémicas declaraciones de su técnico Ricardo La Volpe, ni la respuesta de sus jugadores, sino porque un lote aledaño al club de Atlas comenzó a incendiarse y provocó la movilización de los trabajadores que buscaban apagar el fuego.
Algunos jugadores comenzaron a bajar rápidamente pues sus automóviles estaba cerca de las llamaradas, inclusive el joven Édgar Pacheco gritó: “mi atos, mi atos” y reacomodó su compacto coche ante la burla de sus compañeros que le decían: “mételo en el vestidor”.
La preocupación en los jardineros del club llegó cuando les informaron que no había agua, y sobre todo que el incendio comenzó a esparcirse por el terreno. Pero todo se tranquilizó cuando llegaron los bomberos de protección civil quienes comenzaron a sofocar el fuego con sus pipas.
Fuente: Medio Tiempo
Algunos jugadores comenzaron a bajar rápidamente pues sus automóviles estaba cerca de las llamaradas, inclusive el joven Édgar Pacheco gritó: “mi atos, mi atos” y reacomodó su compacto coche ante la burla de sus compañeros que le decían: “mételo en el vestidor”.
La preocupación en los jardineros del club llegó cuando les informaron que no había agua, y sobre todo que el incendio comenzó a esparcirse por el terreno. Pero todo se tranquilizó cuando llegaron los bomberos de protección civil quienes comenzaron a sofocar el fuego con sus pipas.
Fuente: Medio Tiempo
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